martes, 18 de diciembre de 2018

missatge ocult i anònim

Hola, bonica. Sé que llegiràs això. Sé que sabràs que sóc jo. Sé que sempre comencem al revés i que ara per ara, ja casi s'ha acabat, i pot ser tot fa massa por, tot és massa precipitat. Tenim un adéu per davant i set nits a les esquenes. Entre les cames. Encara ens queda una més.

Per mi, saber que existies, ha sigut el descobriment que ha fet que aquest 2018 valgui la pena. Gràcies per aparèixer, per quedar-te amb mi i per les teves abraçades en les que, sense dubtar-ho, em quedaria a viure. Gràcies pel temps, pels somriures, pels trajectes, per arriscar, encara que només hagi sigut una mica.

Et trobaré molt a faltar. De fet, ja ho estic començant a fer.

Sé que ens hem conegut per alguna rao, et sento molt a prop. Ens veiem aviat, i després, quan el destí ho digui.

Ja sé que no ho faràs, però no t'espantis, valenta. Estic orgullosa de tu.

lunes, 17 de diciembre de 2018

a medias

te giras incomoda
y me pides
que pare
de leerte
lo que siento

qué dolor
escucharte
qué dolor
incomodarte

cierro
la boca
y el corazón,
y se me abren
los ojos
como platos
que,
sin darme cuenta,
se me resbalan
de las manos
y se rompen
en tres-cientos cuatro
pedazos
en tres-cientas cuatro
lágrimas

mi piel se eriza
de miedo,
acabas de llegar
y ya te vas

y lo sabía
pero no tan pronto
no sin antes decirte
que aunque no te conozco
quiero seguir haciendolo
que
en siete noches
has conseguido
matar
todos
mis gatos negros

no quiero que te vayas,
te lloro
es lo mejor,
te autoconvences

me he tragado
palabras
con tal de que no te fueses
antes de irte
y ahora,
nos queda un día
para decirnos
lo que ya sabemos
para decirnos que
el destino es así
y que
aunque no queramos
aunque nos pudiésemos
llegar
a querer,
nos decimos adiós

te miro a los ojos
aunque nos cueste
y puedo verme
despeinada
suplicando
llorando

te miro a los ojos
aunque nos cueste
y puedo verte
y veo tu verdad
tu miedo
te miro a los ojos
y siento
todo lo que callas

tranquila,
ya lo sé.
yo también.

te miro a los ojos
aunque nos cueste
y me doy cuenta
de que estoy perdida en ellos
y que
aunque esto sea un adiós
a medias
-hasta el próximo
último día-
jamás
acabaré
de decírtelo jamás

porque estoy segura
de que
si algún día
volvemos
a vernos
volveré
a verme
en tus ojos,
allí,
perdida
pero tan
y tan segura
pero tan
y tan cómoda,
que haré por no encontrarme,
que haré por quedarme en ellos
siete vidas más
desenredando
nuestro pequeño
fino
pero fuerte hilo

haré por quedarme
justo
donde puedes con todo
justo
en esa parte del cuerpo
que me calma
para dormir

si algún día
volvemos a encontrarnos
te diré,
entonces,
lo mucho que te quería
en mi vida

si algún día,
vuelvo a besarte
te atrapare
en mil hoteles
te atrapare
en mil trenes
te atrapare
entre mis brazos,
y solo si quieres,
intentaré que te quedes
no aquí
ni allí
donde tú quieras,
pero
conmigo

te miraré
y te diré
que ahora
cuando estoy
escribiendo
esto
no te quiero
pero casi
he llegado a hacerlo

y ha sido
una sensación preciosa,
-cómo tú-

feliz viaje
feliz vida
feliz,
a medias, hasta volver a verte, feliz.




domingo, 9 de diciembre de 2018

huecos

entre nosotras
existe un espacio
tan grande
como
este
puto
silencio
que nos acompaña
desde
el último beso

noto 
cómo las vías
de nuestros trenes
me atraviesan
de arriba
a bajo
en cuestión
de segundos

mil pasajeros 
se bajan en mis costillas
rompiéndolas
una
por una
en pedacitos
tan 
tan
pequeños
que casi noto
cómo sale el aire
de mis pulmones
cómo se hincha
mi caja torácica 
cómo explota
todo mi cuerpo
al predecir
qué diran tus labios
cuando ya no quieras
subirte
en mi

soy calma
en tu tormenta
y sigues lloviendo
sin darte cuenta
que aunque el viento
venga de lejos
ya no me lleva
porque 
estoy
anclada
con los pies
descalzos
en tu suelo
y las alas
tan abiertas
que casi 
tocan el cielo

me siento
justo
en el ojo
del huracán
y te leo
en todo éste desastre
lo más bonito que tengo
aunque sé
que vas a marcharte
en cuanto
acabe 
el invierno

no se me acaba
la poesía
cuando te pienso
y siento
que no eres mía
y lo acepto
porque 
te quiero libre
y me muero
si no vuelas
con tus sueños

te observo
detenidamente
mientras duermes
y me quejo
interiormente
por lo caprichoso
que ha sido 
el destino
al tardarte tanto
en mi presente
que ahora 
solo
tengo en mente
querer aprovechar
cada instante
contigo
haciendo
todo
(o nada)
lo que quieras
pero contigo

pero necesitas
espacio
y yo
pienso
que también
lo necesito
pero el mío
mi espacio
es 
ese hueco
que hay
entre tus brazos
cuando duermes de lado
y me apartas el pelo
y me muerdes los hombros
tantas veces
que ahora
no estás
pero me toco
y te noto
y no quiero
dejarte
de notar


jueves, 6 de diciembre de 2018

paisaje favorito

hueles a océano
profunda
indomable
salvaje
insaciable

te enganchas
en mi piel
y soy
incapaz
de deshacerme de ti
-tampoco quiero-
ni del rastro
de tus besos
en mi silueta

el Sol te sienta
tan bien
que
te has convertido
en mi nuevo
paisaje favorito

me revuelvo
en tus ojos
y créeme
no quiero salir

ojalá
tarde
muy poco
en volverte
a contemplar

tren

en mi pecho
se rompen cristales
y suenan
con tanta magia
que casi parece
que anuncian
la llegada de tus besos

siento impaciencia
y me muero
por
dormir
esta noche contigo

dudo un segundo
si subirme
o no
al tren
que me lleva a tus brazos
y me doy cuenta
que allí es donde quiero estar
ser
permanecer
aunque te vayas lejos
aunque esta pudiera ser
la última noche
con tus besos

te llevo tatuada
debajo de mi pecho izquierdo
justo ahí donde laten
todas
las almohadas
que tiramos
al suelo
una
y
otra
vez

hago lo que siento
y te siento
aqui
ahora
tan dentro
que ojala algun dia
puedas comprender
que me faltaran
once millones de vidas
para que se me acaben las ganas
de llegarte a conocer

qué felicidad más tonta
qué bonita tu voz
aunque estés agobiada

qué bonito
haberte encontrado
cuando estaba aislada
y saber
des de antes incluso
de que me hablaras
que me ibas
a cambiar
la vida

sábado, 1 de diciembre de 2018

nunca

me fundo
contigo
cada vez que te miro
porque no sé cómo lo haces
pero cuando
me miras así
sonriendo
vergonzosa
haces que me pierda
en tus ojos
y entonces
ya nada vuelva
a ser como antes

y entonces
me quede atrapada
en el intento
de ser suspiro
alguna de tus noches
cuando no estés conmigo
pero quieras
cuando vayas a dormir
en tu cama
y esté fría
cuando te tapes hasta arriba
sabiendo
que en alguna parte
estoy dejando ir
mi calor
y no te llega

quizás no pase nunca
-y seguramente
sea lo más posible-
pero
si alguna noche
me echas de menos
no te calles

grita
tan fuerte
como den tus pulmones
y te juro
que vengo a calmarte la vida
entre abrazos

grita
aunque solo sea
por un ratito
aunque solo sea
con un mensaje
aunque solo sea
en la imaginación
de aquel que quiere
y no puede

pero grita
y me verás
tan dentro de ti
que no querrás
que salga nunca



te miro a los ojos
y ya me he perdido





pero solo quiero
que me encuentres tú


algún día
quizás


o nunca

faltará

te veo recoger
lo poco
que has traído
en la maleta
y se me encoge el estómago
cuando me doy cuenta
de que no sé
cuándo
volveré a tener tu caos
revuelto con el mío

la intensidad
de lo inesperado
de lo que sale de dentro
cómo un pájaro
cuando alza el vuelo
sin pensar
sin tener tiempo de reaccionar
de otra manera
que no sea
sentir
lo que se siente
y hacer
en consecuencia
lo que se quiere

compartes tu frío
y soy estufa de tu piel
me agarro a tu pelo
y saco
de mi
todo lo que tengo
para abrazarte
en plenitud
asimilando
cada centímetro
a una temperatura en común

te bajas de mi coche
y me tiemblan las piernas
aún
de anoche
y me invade la pena
del no saber
y la alegría
de lo vivido

qué bonito,
este puto invierno
que aún con tanto hielo
nos deshacemos
cada
vez
que
nos
vemos

no pienses
me repito
no pienses
te repito

siento
que me faltará tiempo
para ti
contigo
y no quiero que te vayas

cierro los ojos
justo en el momento
en que me das
el último beso
-hasta próximo aviso-
y intento
transmitirte
-aunque sea la mitad-
de lo que has compartido
conmigo
de lo mucho
que me has llenado
en estos días

te abrazo
y dejo que me recojas
me protejas
y me refugies
hasta el último segundo

veo cómo cruzas hacia el andén
intento no girarme
pero me giro
y pienso
-en lo bonita que eres-
en lo bonita
qué
está siendo
conmigo
la vida
al haberme
cruzado
contigo




vas a quedarte

suspiro tan alto
que me quedo sin respiración
en medio segundo
en medio de tus brazos
en medio de esta noche
intensa
y loca
-cómo todas
cuando duermes
conmigo-

encojo mi corazón
por miedo
a ensancharlo demasiado
con tu respiración
con tus mimos
pero qué más da
-pienso-
ahora
ya no puedo
tirar hacia atrás

me tiemblan
las manos
el pelo
el alma
después de revolcarte
en mi piel

y te prometo
-si es que puedo
hacerlo contigo-
que vas a quedarte
grabada en ellas
el resto de mis días
aunque digan
que nada
dura
para
siempre


pero no sé
qué coño haces
que te echan de menos
hasta las camas
en las que
todavía
no nos hemos hecho,
amor

me queman la garganta
todas las palabras
que me trago
por miedo
a que no sepas
qué hacer con ellas

pero el calor me abriga
me hace sentir viva
no hacen herida,
tranquila

aunque
por el momento
tengo que confesarte
que te has tatuado en mi vida
y como bien sabes
es dificil
-muy dificil-
de borrar
este tipo de tinta



lunes, 26 de noviembre de 2018

fantàstic

Em truques
a mitja nit
amb veu de cansada
i penso que en aquest moment
just en aquest moment
deus tenir
una cara preciosa
-com en tots els altres moments,
pero especialment ara-

Sento com respires
i enyoro
profundament
llegir-te estirades al llit
mortes de vergonya
que si tu em dius vine
vindré,
a fer-te la nit
una mica més curta,
amor. Però no t'espantis.

I ara és quan dius
que tu no t'espantes mai.

Diuen que és meravellós
trobar amb qui
no tenir por de res

i jo sempre contesto:
És genial. Increible.
Fantàstic. Fabulós. Magnífic. Estupendo. Al·lucinant.

falta poc

Potser no trobi mai les paraules
per descriure aquest estrany sentiment.
Qui sap, potser les trobis tu
abans que obri la boca per pronunciar-les.

No se si podre agrair-te mai
que hagis entrat a la meva vida
així, sense ni tan sols plantejar-ho,
però parant la vida a cop de petó.

És increible com fa un mes
eres una desconeguda
i ara sento que em coneixes
però vull més.

Vull descobrir fins on podem arribar,
què podem aguantar.
Si d'aquí a Australia, com diuen,
fa tant de mal. 

Intensitat, em diuen sempre, apaga't.
Et faran mal. Et faràs mal. No.

Treu-t'ho del cap, em diuen, fora. 
No podràs. No ho faràs. No. 

I t'explico un secret? 
Sempre
quan em diuen
que no puc fer una cosa

la faig amb el doble de ganes
i el doble de bé. 

O això intento.

De moment, trobo a faltar els teus llavis
i l'escalfor de les teves abraçades.
Les teves paraules a cau d'orella a mitja matinada.
Les teves mans passejant per les meves costelles
com si demà deixessin d'existir. 
Petons aqui. 
Petons allá. 
Suaus. 
Sense fer mal.

Com vols
no agradar-me
si m'obres el cel
que tothom m'ha intentat tancar.

Tan si m'enamoro
com si no ho faig,
et faré mal, em vas dir.

No m'importa, vaig pensar. 
Tothom t'acaba fent mal, a la vida,
simplement, has d'escollir bé qui.

Potser em toca la grossa
i aconsegueixo fer dos somnis realitat
viatjant a buscar-te
a l'altra punta del món
per quedar-me
just
on ara et crema:

al pit,
abraçada,
tota la vida. 

Però no t'espantis,
això és el que t'escriuria
si estigues començant
a pillar-me per tu. 

Falta poc. 

lunes, 19 de noviembre de 2018

xocolata calenta

No sabíem res
de l'altra
però et miro als ulls
i m'enlluernen
els somnis
que amagues,
i els vull descobrir.

Apago les nombroses llums de la sala,
cap d'elles em fa falta
per sentir les teves
suaus carícies
sense ni tan sols tocar-me.

Encara decideixo
entre cremors
si vull tornar a veure't,
em dius somrient.

Espero que acabis decidint
per tu mateixa,
que el que no vols fer
és marxar, penso impacient.

De moment,
portem dues xocolates,
tres llits,
dues nits
i cinquanta casualitats
a les esquenes
i no em pesen.

M'aportes tanta seguretat
que puc enlairar-me
per sobre meu
i et veig
lluny
i et vull
encara
més a prop.

Et toco les mans
buscant
un tros de cel
però trobo
la realitat de la terra
i em sembla (i sembles)
preciosa.

Vols una altra
(nit
abraçada
petó
vida)
xocolata calenta?

Jo si.

domingo, 18 de noviembre de 2018

te enredo

Tengo que pedir perdón
al universo
porque éste fin de semana
iba a ser la lluvia de estrellas
y miles de personas han salido
a mirar al cielo
y lo que no saben
es que
todas
han caído en ésta cama
deshecha de caricias
de besos
de fuego
lento y rápido
de amor
y qué puto milagro
verte tan de cerca.

Te miro a los ojos
justo
en este preciso momento
cuando me escuchas recitarte
enredada
en unas sábanas
quemándose
pero mojadas
hasta el alma
de ganas
de revolvernos
otra vez
de comernos
a besos
pero dejando
un poquito
para la siguiente.

Me siento afortunada
por tenerte
aquí delante
con ésta luz
a ésta hora
en éstas circumstancias.

Me siento afortunada
por ti
porque quieras
compartirte conmigo
aunque sabes
que en mi pecho
hace
todavia
más calor

No sabemos nada,
nos repetimos
fervientemente
para fijarnos
solo
unica
y exclusivamente
en el presente.

En aquí.
En ahora.

En que te encuentras
desnuda
justo
delante de mi,
en que me miras
con ganas
y como si me dijeras
ven
y quédate a morir.

Y me acerco a ti
con mirada sigilosa
con sonrisa peligrosa
con el pelo
enredado
y el collar en el que guardo
nuestras noches.

Te cojo la cara
sonríes
te beso
me besas

Y yo acepto.

sábado, 17 de noviembre de 2018

puerta abierta

Te has subido al tren
después de tres mil besos
y me has dejado el corazón
literalmente corriendo
pero estirado
aún en mis sábanas.

Noto cómo tus manos
me quitan los miedos
mientras conduzco
mientras me besas
mientras
me estremezco entre tus brazos
y grito
sin poder evitarlo.

Te miro a los ojos
y me pierdo
otra puñetera vez
en las arrugas
que se te hacen en la piel
cuando sonríes
así
acalorada
y vergonzosa.

Qué más da todo
si al fin y al cabo
abro los ojos y ahora
te encuentro a mi lado
aunque no estés conmigo

Qué más da el futuro
si me vale el presente
en el que a contracorriente
me quedo en tus abrazos
a vivir
eternamente

Qué más da el lugar
si en cuestión de tener un par
no nos gana nadie,
y lo sabes,
dime ven,
y te juro,
preciosa,
vengo
a hacerte volar.

Me coges con tantas ganas
que parece
que el mundo
se va a derrumbar
y las que se derrumban
son mis piernas.

Vamos a vivir
sin reprimendas,
déjame poner la lengua
en medio de tu vida
y lamerte las heridas
hasta
que
contraigas
cada músculo
enganchada a mi piel

y entonces
ya no sepas
ni quieras
salir de aquí.

Pero te dejo la puerta abierta.

“Te veo sobre la cama y quiero quedarme a vivir, y no sé ni tu nombre”

martes, 13 de noviembre de 2018

no te asustes

Llevo dadas las mismas vueltas a la cabeza
que las que hemos dado en la cama
y aún no entiendo
por qué
ahora siento
un vacío en el pecho
por qué
mis labios
todavía laten
se mojan
y sienten
tus besos


No me conoces, me repites
No me importa, te contesto.


Qué bien sienta
de tanto en tanto
encontrar gente como tú
que te abre las puertas
de tu propia mente
de sus piernas
y de la vida entera
sin pedir nada a cambio


Me escuchas y te lamentas
sobre lo que he tenido que pasar
para llegar a donde estoy
(y todavía me pregunto qué sitio es ese)
pero qué bonito estar aquí
mirándote a los ojos
y veo
tantas cosas
que no sé cómo explicarlas
y me pierdo
y me encuentras
nos encontramos
desnudas
besándonos los tatuajes a fuego
como si la vida se acabase al cerrar los ojos
como si después de esto nos esperara la nada
y no podemos hacer nada para evitarlo


Cómo voy a explicar a qué saben tus caricias
si mi cuerpo todavía quiere más
cómo voy a explicar el matiz de tus besos
si nuestros labios casi se han llegado a fusionar


Explícame cómo sin conocerte
siento que llevo toda la vida esperando encontrarte
Explícame como sin buscarte
siento ahora un poco de miedo a cuando te tengas que ir.


Sólo un día
me repito de manera constante.
Sólo un día
hemos pasado juntas
pero joder qué día.


Noto cansancio en cada célula de mi cuerpo
pero repetiría mil veces
ésta maldita locura
que ha sido conocerte
y descubrir
lo valiente que puedo ser
cuando me escucho a mi misma
lo bonita que es la vida
cuando la vives como quieres
y lo maravillosas que son las horas
cuando pasan sin darse cuenta
y vuelan
mientras tú
y yo
nos llevamos a las estrellas.


Me cuesta respirar profundo
supongo que sabrás porque.
Me cuesta abrir los brazos
de tanta fuerza
con la que te abracé
durante todo el día
y toda la noche.


No te asustes, te repito.
Yo jamás me asusto, me contestas.


Ojalá, pienso.

en llamas


Podría perderme en la curva que hay entre tus ojos y tus mejillas, a contemplar el cansancio que se acumula en tus huesos, a contemplar la vida a través del campo de tu mirada en primavera, cuando el agua todavía está helada pero el Sol sale a brillar después de cada madrugada y llena el calor de flores.

Podría meterme ahora mismo en tu cama y decirte que eres la flor que mejor huele en éste campo en ruinas, que jamás había contemplado unos colores tan vivos en otros prados y que la primavera es primavera desde que la observo a tu lado. Y aunque todo eso pueda ser cierto, me limito a contemplar esa medio sonrisa tímida y vergonzosa mientras me digo a mi misma que he tenido una suerte de cojones al encontrarte cuando estaba medio perdida y que a partir de ahora los inviernos se me harán menos largos si puedo pasearme por tu cálida sonrisa.

Qué les den a aquellos que intentaron pisotear tus ganas
y a los que no creyeron que de las cenizas resurgirían las llamas.

Joder,
no sabes cómo me muero de ganas
de tirarme ahí
a tu lado
de poder ver de cerca
tus labios
y escuchar en silencio
y muy atenta
lo que para mi
tienen preparado
en la vida
en la cama
o a tu lado.

martes, 23 de octubre de 2018

Agua embotellada y quemada

Quizá hubiera preferido perderte drasticamente, por alguna razón clara y concreta. Con algo a lo que aferrarme, con algo a lo que pudiera echar la culpa de que ya no estés a mi lado, aunque sigas aqui.
Me duele cambiar tantos significados como segundos pasa en un día. En mil días. Tres años. Dos millones de sentimientos colgando de un hilo tan fino que cuando sopla un poco el viento se enreda para siempre sin poderlo evitar. 

Siempre pensé que serías la excepción de mi vida y que te quedarías conmigo a mirar las estrellas cada noche, aunque no se vieran, aunque las tapasen cientos de miles de millones de nubes, aunque lloviese, aunque fuera en la calle estuviera nevando. Siempre pensé que seriamos tan eternas e infinitas como el universo, siempre en expansión. 

No sé qué he hecho. No sé qué debo hacer. No sé por qué haces esto. Y eso duele. Duele no tener la culpa, ni tu ni yo. Duele no saber cómo tengo que actuar cuando mi cuerpo me impulsa hacia delante, hacia tu boca y tus labios. Cuando cada puta celula de mi piel me pide a gritos que te muerda la rabia esta noche y jamás volvamos a despertarnos. 

Dime qué sentido debo encontrarle ahora a la vida si siempre he tenido un sentido de la orientación nefasto. Que hasta tú sabías moverte mejor por Barcelona que yo, y eso que he ido doce veces más que tu, o quizás doce mil. Dime qué vuelta tengo que darle a la tortilla si ya se ha quemado de tanto querer reavivar la llama que dejaste encendida, con el extractor de humo a toda pastilla por si la casa se iba a la mierda de tanto arder. 

Y mientras tanto yo, quieta, con el corazón quebrado de tantos errores, me quedo mirando el fuego, como explota, como se extingue. Me quedo quieta mientras mirando el fuego me imagino como vienes y me salvas, pero a la vez, me imagino como vienes y salvas a todo el mundo menos a mi. Duele ver la realidad aunque no sea esa la verdadera. Duele en mi cabeza. 

Odio no poder confiar plenamente en lo que tu me dices. Odio no tener ni un resquicio en tu mirada de aquello que creamos en uno de los peores veranos de nuestra vida y a la vez, el principio de nuestra preciosa y emocionante historia, aunque en algunos momentos fuese un infierno de lo mucho que quemava, los días de frío agradecía tu furia y tu calor, la verdad. Siento haber sido llamarada cuando en el desierto no buscabas un encendedor sino agua.

martes, 16 de octubre de 2018

No puedo, no quiero, pero te quiero

Qué duro
Dejar de querer así
Porque sí
Porque tu ya no

Qué duro
Saber que duele
tanto para mi
como para ti
así:
Por separado
pero tan juntas que noto
cómo mi respiración
entorpece tu felicidad
tu tranquilidad

Qué díficil asimilar
que aunque tu cuerpo siga durmiendo conmigo
ya no camino contigo

Qué angustia me da
tener que recoger todo lo vivido
durante tres largos
felices
tristes
y emocionantes años
de tu mano
en tu pecho
y por ti.

Cuánta fortaleza desborda mi mirada
cuando te veo llorando
y vengo corriendo
a decirte
que no pasa nada
que está bien así
separadas,
todo
para evitar que tus lágrimas caigan.

Qué altruista mis sentimientos
que intentan retenerse
que se aguantan las ganas de explotar
por verte un poquito menos mal

Qué raro se me hace
llevar tu anillo
de “volver a empezar”
y conjugar fechas y que justo
cuando me lo diste
fuese el principio de nuestro final

No te imaginas cuánto vertigo me da
imaginarme la vida sin tu latido arritmico
que me daba esa tranquilidad
de la torpeza
de un corazón que no sabe cómo amar
pero lo intenta
y así es como ama de verdad.

Se me empaña el cuerpo
al asimilar
que tus manos
no me van a volver a hacer tocar
aquello tan nuestro
que llamabamos refugio y hogar,
orgasmo,
nuestro momento,
mi manera de amar.

Pero no puedo obligarte,
y por eso,
me obligo a dejarte ir,
me obligo a no llorar,
me obligo a saber estar,
quedar,
permanecer estable.

No puedo obligarte a que me quieras,
lo superaré, algún día,
pero de momento,
y lo hago sin obligarme,
nos quiero por las dos.

De momento, y lo hago por no obligarte,
dejo que te vayas
aun cuando sé
que a ti también te duele
ver cómo me obligo.